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ESPERIENTZIA OSOA

 
Julen Ibarburu

Julen Ibarburu

Enpresen Administrazioa eta Zuzendaritza

Erroma, Italia
 

Mi erasmus en Roma ha sido una experiencia enriquecedora

La peculiaridad de mi erasmus ha sido que la universidad a la que he ido era “online” si se puede decir así. El método de estudio era descargarse unos apuntes en pdf desde una plataforma de la universidad, al estilo Mudle, y estudiar de ahí hasta el día del examen. No había ninguna clase, ni online ni en aula ni nada parecido. Además, los profesores no contestan al correo hasta varios días después y te podías pasar alguna que otra hora esperando sentado al profesor que te iba a hacer el examen que te tocaba.

Esto ha hecho que no tuviera una rutina clara establecida durante 6 meses, y que, a las mañanas, cuando todo el mundo estaba o estudiando o en clase nosotros estábamos en casa sin saber muy bien qué hacer.

Al principio nos gustó la idea de que la universidad fuera tan laxa, ya que podíamos aprovechar para hacer turismo por Roma cuando quisiéramos, pero cuando has visitado todas las calles y monumentos alrededor de 10 veces empieza a aburrir un poco el tema de hacer turismo.

El resto de la experiencia creo que ha ido bastante bien en general. He viajado a Grecia y he hecho un viaje tipo mochilero por algunas ciudades de Italia, creo que podría haber hecho algún viaje más pero no me puedo quejar.

En cuanto a relaciones personales ha ido bien salvo algunas cosas puntuales. He tenido prácticamente nula interacción con personas internacionales, ya que Roma estaba completamente lleno de españoles, por tanto, solo me he relacionado con estos. 

Además, da la casualidad de que la mayoría de nuestro grupo de amigos éramos vascos y he podido hablar y escuchar bastante euskera.
 

El euskera de mis amigos no era precisamente mi lengua materna ya que la mayoría eran de Bizkaia, concretamente de Ondarroa, Gernika y Elorrio salvo alguno de Bergara y Aretxabaleta. Así que curiosamente me ha servido para recuperar un poco el euskera que tenía tan oxidado, cosa que agradezco.

Algo que he descubierto y he aprendido sobre mi durante toda esta estancia en Roma ha sido lo importante que es para mí la cotidianidad de mi casa y de mi ciudad, es decir, toda las personas y las costumbres que les rodean y nos relacionan. Con esto quiero expresar lo mucho que he echado de menos a partir de la segunda mitad del segundo mes a mi familia, mi cuadrilla, mi casa y mi ciudad.

Es algo que no me esperaba que me iba a pasar ya que creía que iba a estar haciendo tantas cosas que no me iba a dar tiempo ni en pensar en ellos, pero nada más lejos de la realidad. Al pasarme la mayoría del tiempo haciendo prácticamente nada, como he expresado en uno párrafos más arriba, he echado de menos la vida que tenía en Donosti. Cosas como ir al gimnasio, ir a tomar un café al bar de confianza con los de siempre o simplemente no hacer nada, pero en mi casa, son cosas que en muchas ocasiones he echado en falta ya que son cosas que aquí no he podido hacer.

En conclusión, creo que mi erasmus en Roma ha sido una experiencia enriquecedora, aunque creo que de alguna forma podría haber sido más completa y mejor en general. He conocido a mucha gente de todos los rincones de España y he viajado a nuevos sitios de los cuales me acordaré toda la vida. He aprendido a ser un poco más independiente, organizado y más echado para adelante sobre todo con lo que tiene relación a la vida cotidiana de la vida adulta.

Julen Ibarburu